PÁNIKER (I) LOS DIARIOS
Ideas tomadas de declaraciones periodísticas de Salvador Pániker (más o menos textualmente). Un blog, un cuaderno de bitácora, o como se le quiera llamar ¿es un diario? En tal caso ¿para qué sirve llevar un diario? ¿es compatible escribirlo y seguir viviendo?
Un diario es un autoanálisis que te habitúa a enfrentarte y no ser esclavo de las emociones y eso permite cambiar un marco de referencia que nos resulta insoportable: no es el mundo el que nos guía, son nuestras ideas (Epícteto).
Trato de conciliar escritura y vida. Me gusta vivir y escribir simultáneamente. Los diarios están escritos al hilo del acontecimiento, de la anécdota, porque los diarios deberían ser como terapias cognitivas.
Como tal, la novela está acabada. Hoy hay que mezclar ficción, narración, reflexión, anécdotas, crónica. Yo, en general, soy un híbrido y defiendo el hibridismo de todo tipo (ideológico, religioso, estético, filosófico).
La vida es un concierto en el que cada uno ha de aprender a tocar su música. Habida cuenta que cada cual ha de afinar su propio violín, uno se decanta hacia el diario íntimo, la propia construcción del mundo, la novela de un solo personaje o mejor, la novela sin personaje, la difícil captura de la facticidad de cada día, una cierta voluntad de no hacer trampa.
4 Comments:
El descubrimiento del blog o bitácora es impresionante. Muchos lo utilizan como confesión, como escape, como posibilidad para hablar de temas que interesan. Cada uno de nosotros expresa un mundo personal que se acerca mucho al diario o confesión persona, con intereses particulares, con cuestiones que le apetece plantear. Es una necesidad de expresar sentimientos, ideas, acontecimientos, y que alguien lo lea y comparta con nosotros su propio universo. Aquí es, precisamente, donde creo que hay diferencias entre el diario y el blog. Normalmente el primero es para uno mismo, sin darlo a conocer , por lo general;el blog, sin embargo, creo que surge por otros motivos. Hay una necesidad mayor de comunicación, de relacionarse unos con otros. Al menos así lo siento yo.
Saludos
Sí, Gatito nuevo. Yo he escrito muchos cuadernos para mí mismo, copiando cosas que me gustaban de diarios, de libros...escribiendo lo que sentía, proponiendome metas, formalizando compromisos conmigo mismo (nunca más, a partir de ahora). Abundaba el infinitivo (ser de tal forma, procurar, tener en cuenta...). Abundaba la frase negativa: no más, no debo, es malo para mí...En el blog toda esta moralina, todo este ajuste de cuentas queda fuera. En el blog tengo una actitud positiva...ayudar o por lo menos ayudarme ayudando. Dejar de darme sermones, renunciar a la perfección, a la auto-exigencia...La vida no tiene que ver con la pureza ni con el deber ser y el diario,muchas veces, incurre en eso. ¿No te parece? Es preciso escribir de forma menos personal, mirar afuera de uno, tomar un punto de vista menos intervenicionista en la realidad: lo sagrado es lo real. Lo único verdadero es la vida y la vida no es pura, no es clara, no es racional. Una caricia, Gatito.
Hola a los dos! Estoy básicamente de acuerdo con vosotros pero no puedo resistirme a añadir un matiz. Sin duda el blog lleva implícita la comunicación con los demás pero ¿no tendrá un componente egocéntrico? Yo creo que sí. Todo aquello que te estabas contando a ti mismo quieres que sea leído y, además, que genere una reacción. Y, precisamente, al convertirse en un hecho público aplicamos una autocensura por temor a caer en la exageración y esa auto-exigencia que comentaba Francisco. Por ejemplo, cuando escribo para mí caigo en una tendencia metafísica que roza el ridículo, si no lo supera, en la que maximizo mis actos y mis sentimientos. Pero cuando sé que alguien me puede leer el pudor frena mis dedos.
Hola Badly: estoy de acuerdo en lo del egocentrismo. Éste, es un sitio público. Sin embargo, se trata de un cuaderno personal: ahí está la cosa. Un diario abierto a cualquiera, a los comentarios ajenos. Yo creo que esto se puede hacer desde el distanciamiento o desde la intimidad (para uno). Pero, desde que se establece contacto con otras personas, la distancia se acorta y la intimidad crece: es algo que vamos haciento entre varios, donde surge la confidencia, como si estuvieramos solos. Lógicamente, comporta cierto desentendimiento de los demás que, en la vida diaria, no utilizamos. Saludos.
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